EL DESAYUNO DEL ENCIERRO
Cuenta el periódico hoy, que en Móstoles, pueblo que plantó cara a los franceses almorzando migas manchegas y cenando gabacho, se ofrece para después del encierro de las fiestas patronales, un desayuno gratis a base de huevos fritos y beicon. Un encierro es la versión igualitaria y democratizada del arte de los toros; un graffiti manchado de calimocho, al lado de un Velazquez con perfume de magia divina.
Foto humeante en el diario que rezuma náusea de colesterol; se ven las paelleras en su fogoso crepitar, donde las tiras de cerdo se retuercen y los "morenos" se apuntillan. Sonar de cacharros, me imagino, y delantales blanquísimos anunciando algún producto limpiador. Demasiado alimento para tan poco mérito.
Curiosa mezcla ésta: Siglo veintiuno galopando, humanidad sumergida en "chips" y retorno a la vida frugal, y por esos pueblos del señor, para enjugar el sudor de los que corren delante de los "morlacos" ( y de los que no), se prepara un desayuno que ni el diablillo más especializado en atascar las tuberías del cuerpo se hubiera imaginado.
Pero, ya se sabe... si es gratis.... Qué pena ver tanto borrego estabulado entre las vallas del consistorio. Los abuelos que te piden asiento en el bus, con miradita de carnero degollado, con ese aire de ex-campesino que se ha segado Castilla y parte de Andalucia, ahora pueden aguantar horas de pie, fíjate tu, gracias a las fuerzas que proporciona la gorronería y el premio gordo del cotilleo.
Grasaza con pan, pero por la patilla. ¡Qué ejemplo más torpe de desayuno madrileño, o español si todavía se puede decir! Seguro que los promotores de semejante horterada, cuando vuelven al redil, echan pestes de los yankis y montan manifestaciones contra las bases militares; dianas colgadas detrás de la puerta con la foto de Condolezza y un dardo en la punta de la nariz, ¡snif! .
Pero ahora toca huevos con bacon, o con beicon, rico, rico, y venga a rellenar las venas de ateromas, como el que hace chorizos.Todo sea por que venga la tele, y nos saque tan guapos con el traje de la "peña", y alguno suelte alguna ordinariez en directo. Ojala estén ahi los de "España directo" que de caldereta en paella van, para enseñar al país (¿eso qué es?) lo bien que nos lo montamos, mire "usté".
Dieciocho mil huevos, mil ochocientas barras de pan, cuatrocientos kilos de "puerco", nueve mil mostoleños... cómo molan las cifras. ¡Dónde han quedado los churros con chocolate! ¡Donde las torrijas! ¡A mi un buen café, soliplás pero con cuerpo! Ya que de maltratar el corazón va el asunto, elijo arma homicida: unas porras para el menda, y en su defecto, sopas berrendas. RIP
Foto humeante en el diario que rezuma náusea de colesterol; se ven las paelleras en su fogoso crepitar, donde las tiras de cerdo se retuercen y los "morenos" se apuntillan. Sonar de cacharros, me imagino, y delantales blanquísimos anunciando algún producto limpiador. Demasiado alimento para tan poco mérito.
Curiosa mezcla ésta: Siglo veintiuno galopando, humanidad sumergida en "chips" y retorno a la vida frugal, y por esos pueblos del señor, para enjugar el sudor de los que corren delante de los "morlacos" ( y de los que no), se prepara un desayuno que ni el diablillo más especializado en atascar las tuberías del cuerpo se hubiera imaginado.
Pero, ya se sabe... si es gratis.... Qué pena ver tanto borrego estabulado entre las vallas del consistorio. Los abuelos que te piden asiento en el bus, con miradita de carnero degollado, con ese aire de ex-campesino que se ha segado Castilla y parte de Andalucia, ahora pueden aguantar horas de pie, fíjate tu, gracias a las fuerzas que proporciona la gorronería y el premio gordo del cotilleo.
Grasaza con pan, pero por la patilla. ¡Qué ejemplo más torpe de desayuno madrileño, o español si todavía se puede decir! Seguro que los promotores de semejante horterada, cuando vuelven al redil, echan pestes de los yankis y montan manifestaciones contra las bases militares; dianas colgadas detrás de la puerta con la foto de Condolezza y un dardo en la punta de la nariz, ¡snif! .
Pero ahora toca huevos con bacon, o con beicon, rico, rico, y venga a rellenar las venas de ateromas, como el que hace chorizos.Todo sea por que venga la tele, y nos saque tan guapos con el traje de la "peña", y alguno suelte alguna ordinariez en directo. Ojala estén ahi los de "España directo" que de caldereta en paella van, para enseñar al país (¿eso qué es?) lo bien que nos lo montamos, mire "usté".
Dieciocho mil huevos, mil ochocientas barras de pan, cuatrocientos kilos de "puerco", nueve mil mostoleños... cómo molan las cifras. ¡Dónde han quedado los churros con chocolate! ¡Donde las torrijas! ¡A mi un buen café, soliplás pero con cuerpo! Ya que de maltratar el corazón va el asunto, elijo arma homicida: unas porras para el menda, y en su defecto, sopas berrendas. RIP
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